Mi viaje a la Selva Negra fotografiado en Polaroids con la Polaroid Supercolor 1000

Cuando hace unos años apareció en un rincón la vieja cámara Polaroid de mi abuelo, a malas penas utilizada por él y prácticamente abnegada al olvido entre el polvo, nada hacía presagiar que un tiempo después acabaría no solo volviendo a fotografiar de nuevo, sino viajando por el mundo.

En este caso, y aprovechando un viaje familiar a la Selva Negra -las zonas boscosas que separan Alemania de Suiza- decidí invertir en un par de cartuchos The Impossible Project -recordemos que los precios prohibitivos de la marca hacen que prácticamente comprar un par de cartuchos te suponga hacer un hueco en tu presupuesto para afrontar esta compra- y rezar porque cada disparo mereciera la pena y que la mayor parte de las hojas fueran buenas fotografías.

Se puede decir que lo conseguí. De 16 disparos disponibles, 12 de ellos fueron exitosos. Esto es un 75% de la película aprovechada y, teniendo en cuenta que las emulsiones de Impossible -todavía en fase de testeo en su mayoría-, tienden a jugar malas pasadas con la exposición, no me puedo quejar. Aquí adjunto una selección de esos disparos que me gustaron, aunque hay un par de ellas que, pese a que salieron bien no me convencen lo suficiente para añadirlas.

¡Espero que os gusten!